Björk regresa con su nuevo disco que se titula Fossora, un álbum inspirado totalmente en la naturaleza desde el nombre del mismo, y es que su nombre en latín significa excavadora, una referencia a los bosques. La islandesa definió al sonido de su nuevo material discográfico como biological techno.
En una íntima entrevista con The Guardian, la islandesa más famosa del planeta reveló que su nueva creación discográfica estuvo muy influenciada por los hongos y el regreso a su tierra natal durante la pandemia.
Fossora, ya disponible a través de One Little Independent Records, incluye colaboraciones con Serpentwithfeet y los punks indonesios Gabber Modus Operandi, así como contribuciones de su hijo Sindri y su hija Doa.
Así mismo, la portada del disco muestra a Björk como un duende del bosque que brilla intensamente, mientras las yemas de sus dedos se unen con hongos fantásticos.
Björk también reveló que sus nuevas canciones están en su mayoría alrededor de los 80-90 latidos por minuto porque esa es la velocidad a la que camina.
La islandesa ha definido a su disco con un sonido de “biological techno”, pero sea lo que sea que eso signifique, en el sencillo líder del disco “Atopos” Björk la considera un “buen pasaporte” al concepto del álbum. La canción tiene un arreglo de seis clarinetes y un beat electrónico que “perfora y cava el suelo”, al tiempo que “nos anida en él”, esto de acuerdo a sus propias palabras.
“Debido a la enorme importancia del bajo en esta canción, ¿podrías ponerlo a todo volumen?”, dijo Björk en sus redes sociales.
Asimismo, Fossora es una respuesta a Utopia (2017), el último trabajo de la artista, ya que estuvo influenciado por el dolor de la pérdida de su madre, que falleció en 2018, y la mudanza de su hija menor fuera de casa. Mientras que Utopia es un álbum pacifista e idealista, con flautas, sintetizadores y pájaros, Fossora representa la vida real dentro de este mundo de cuento de hadas, pero también es una celebración de la fuerza femenina y de su madre.
Sobre la muerte de su madre, Björk dijo que: “Fue muy temprano. Mi hermano y yo no estábamos listos… Pensamos que teníamos otros diez años”.
“Ancestress”, el tercer sencillo del disco es una carta abierta sobre este doloroso acontecimiento y la canción está escrita en orden cronológico desde el punto de vista de la artista. También, es la pista más larga del álbum al superar los 7 minutos de duración y se regodea de beats cortantes y melodías instrumentales que parecen inspiradas en la música imperial china.
Las canciones del disco fueron escritas durante y después del encierro por Covid, que vio a la cantante regresar a su país de origen. “No creo que haya estado tanto en casa desde que tenía 16 años”, dijo. “Me siento culpable por admitirlo, pero comía budín de chocolate todos los días. Realmente fue un castigo y realmente, realmente me encantó”.
Björk describe el álbum como un “álbum de hongos”. Y agregó: “Es como cavar un hoyo en el suelo”. Björk también confirmó que ha estado revisando sus archivos musicales para hacer una serie de podcasts sobre su discografía, que saldrá este otoño junto con el álbum.
