La evolución de los videojuegos en los años 90 fue una etapa crucial que transformó la industria, sentando las bases para los títulos modernos que conocemos hoy. Este periodo marcó el auge de las consolas domésticas, la transición de los gráficos en 2D a 3D, el nacimiento de géneros que todavía dominan el panorama, y el crecimiento de los videojuegos como un fenómeno cultural masivo.
Un fenómeno que comenzó con los arcades para evolucionar hacia los videojuegos actuales. Un caso similar a lo sucedido con las tragamonedas online, las cuales son la evolución de aquellos míticos carretes físicos. Algo que es reseñable y que conviene repasar, cómo ha sido el camino hasta estos días, de un sector gaming que es líder del ocio mundial en estos momentos.
La Transición a los Gráficos en 3D
Uno de los cambios más importantes que caracterizó a los 90 fue la transición de los gráficos bidimensionales a los tridimensionales. Durante la primera mitad de la década, la mayoría de los juegos utilizaban gráficos en 2D o una aproximación a las tres dimensiones, típicos en consolas como la Super Nintendo o Sega Genesis. Sin embargo, con la llegada de hardware más potente, como el PlayStation y el Nintendo 64, los desarrolladores comenzaron a explorar las capacidades del 3D.
Los juegos en 3D trajeron consigo una nueva manera de diseñar niveles, personajes y mecánicas de gaming. En lugar de los desplazamientos laterales o vistas aéreas tradicionales, los desarrolladores podían ahora diseñar entornos completamente tridimensionales en los que los jugadores tenían libertad de movimiento en todas las direcciones. Esto permitió el nacimiento de géneros nuevos, como las aventuras en 3D y los juegos de plataformas que se valían de las nuevas capacidades técnicas.
El Auge de las Consolas y las Guerras de los 16-bit
Los años 90 comenzaron con la llamada «guerra de las consolas» entre Sega y Nintendo, las dos principales empresas competidoras de la época. Nintendo dominaba con su Super Nintendo, mientras que Sega se hizo un nombre con Mega Drive. Ambas consolas ofrecían juegos avanzados para la época y gráficos de alta calidad que establecieron estándares para la industria. Esta rivalidad no solo impulsó la innovación, sino que generó una intensa competencia en el marketing y en la fidelización de los jugadores.
Cada empresa lanzaba campañas publicitarias agresivas para promocionar sus juegos y consolas, y este enfrentamiento ayudó a definir la cultura gamer de la época. Además, se lanzaron títulos icónicos que siguen siendo recordados y jugados hasta el día de hoy, lo que cimentó la presencia de estas compañías en la industria durante los años siguientes.
La década de los 90 y el sector gaming, un periodo de tiempo muy propicio para este tipo de pasatiempos, que se convirtieron en parte de la vida de una generación.