Las matemáticas, un imprescindible en los juegos
Aunque la mayor parte de las veces no nos demos cuenta, las matemáticas se encuentran presentes en todo lo que hacemos, por eso a los niños pequeños se les introducen desde antes de comenzar la escuela, y es que las emplearán durante el resto de sus vidas. Incluso en el mundo animal es posible comprender y emplear las operaciones más sencillas. Y es que añadir y sustraer son métodos básicos de enseñanza y aprendizaje (premios y castigos: si se hace algo bien, se añade algo reconfortante, y si se hace algo mal, se retira).
Pero más allá del condicionamiento clásico, los niños empiezan a comprender a través del juego y el deporte las sumas y restas primarias y las series de elementos. Es un sistema tan implícito en todos los aspectos de nuestra vida que lo introducimos con total naturalidad en todo lo que hacemos: cuando cocinamos, las cantidades empleadas o el tiempo de cocción es esencial para que la receta salga como deseamos, cuando se construye un edificio, se calcula la resistencia de materiales y estructuras, y cuando bailamos, el ritmo se convierte en una secuencia con la que debemos hacer coincidir nuestros movimientos.
Concretamente en el juego, cada vez se emplean más las matemáticas conscientemente. Todos comenzamos jugando al parchís o al dominó, o a juegos de cartas en los que hay que sumar ciertas cantidades, pero hasta en los juegos más sofisticados, hay que tener en cuenta las matemáticas para poder seguir avanzando. Por ejemplo, en los juegos de batallas por turnos es esencial conocer el poder de cada personaje, su nivel, el poder total de el equipo o cuántas recargas necesitan hasta poder volver a lanzar su ataque más fuerte o magia. Aunque a este tipo de juegos se puede jugar por puro instinto y sin pensar, si hay detrás una estrategia basada en este tipo de cálculos los resultados serán mucho mejores.
Lo mismo sucede en los juegos de casino: se consideran de azar y es cierto que es un componente esencial en ellos pero… ¿acaso el azar no es un elemento inherente a cualquier juego? De no ser así, sabríamos quién va a ganar desde el principio. Pero, efectivamente, detrás de cada juego de casino hay una estrategia que podemos aprender para tener mayores probabilidades de éxito, y la mayor parte de las veces tienen que ver estrictamente con las matemáticas, como contar en blackjack, que de hecho no tiene un solo método para hacerlo, sino que hay muchos modos en función de en qué fijemos nuestro interés.
Por supuesto, los juegos puzzle son aritmética pura. Desde el milenario Tan-Gram basado en triángulos hasta el Tetris o el Candy Crush, las matemáticas son las auténticas protagonistas, representadas de una manera muy visual. En los últimos años han aparecido juegos como el 2048 que está absolutamente centrado en realizar sumas, multiplicaciones y potencias, y que ha logrado convertirse en un viral. Antes que este, el Sudoku, tanto en formato tradicional de revista de pasatiempos como en digital para smartphones y otros dispositivos, puso a prueba la lógica y la paciencia de muchos al exigir crear un cuadrado perfecto de 9 x 9 casillas.
No debemos olvidar que el lenguaje y las matemáticas son dos caras de la misma moneda, y que juegos como el Scrabble ponen un valor numérico a cada letra, con lo que finalmente, las palabras también se convierten en una secuencia basada en el cálculo, al menos en juegos como este o su hermano pequeño Apalabrados. Allá donde miremos, nos daremos cuenta de que las matemáticas están implícitas.
