Han pasado solo un par de días desde que se anunció el despido de Miguel Herrera, y el ‘Piojo’ ya dio sus primeras declaraciones ante las cámaras.

Se le vio con el rostro desencajado a Miguel, mientras hablaba con Roberto Gómez Junco y David Faitelson, para ESPN.

Se le vio dolido al ‘Piojo’ Herrera, y él mismo manifestó sentirse así, catalogando su salida de Tigres como el golpe más duro en toda su carrera.

¿Por qué terminó por irse del equipo, teniendo aún 6 meses más de contrato?

Ya hasta estaban viendo jugadores en el extranjero, preparando todo para el próximo torneo, cuando Mauricio Culebro lo citó en su casa para hablar sobre ‘unas cosas’ y desayunar.

Desayuno que no se concretó, sin embargo. Como tampoco se concretó el sueño que tenía Miguel Herrera de quedarse por muchos años en la institución felina.

¿Cuál fue el pecado de Miguel?

Lo más sencillo es pensar que el ‘Piojo’ perdió su trabajo por las declaraciones ofrecidas después de la derrota ante Pachuca, en la que llamó ‘viejos’ a sus jugadores.

No obstante, pasaron varias semanas desde entonces.

Si ese hubiera sido el motivo, ¿no creen que lo habrían corrido desde hace días?

¿Por qué hacerlo ahora?

¿Qué ocurrió en todo este tiempo?

Hay quienes aseguran que la relación se comenzó a fracturar desde el torneo anterior, cuando una alineación indebida le costó la eliminación a sus dirigidos.

Pero igual, si ahí comenzó a romperse todo, ¿por qué dejarlo cuatro meses más?

¿Por qué permitir la salida y llegada de jugadores que él solicitó?

Todo esto me hace pensar que la decisión no tuvo que ver precisamente con Mauricio Culebro. Que alguien llamó a su teléfono y le ordenó que terminara su relación con el ‘Piojo’

La verdad solo la saben ellos, pero yo, desde mi trinchera, les digo que el pecado de Miguel Herrera no fue esa desatinada declaración ni lo de la alineación indebida.

Lo que cavó la tumba del ‘Piojo’, fue el momento.

Sí, el maldito momento.

Fue llegar a un equipo que recién había salido de su mejor época, cuyos jefes parecen estar obsesionados con borrar todo lo que huela ‘al otro’.

Esta dirigencia toma decisiones al calor de un pasado que quieren olvidar, pero que no podrán.

Quieren ganar a la de ya todo lo que ‘el otro’ ganó, pero no lo conseguirán.

La sombra de Ferretti los espanta. En su corrida despavorida, se han llevado de encuentro al ‘Piojo’, como seguramente se llevarán a muchos otros, porque da la impresión de que no hay una idea sólida ni un proyecto base.

Están tan obsesionados con ser ellos los protagonistas de la historia (para que así ya nadie mencione ‘al de antes’), que están acabando con todo lo que se les cruza por el camino.

Ahora quieren a Cocca o a Gareca, y entre ellos no hay nada en común.

Quieren ganarlo todo con Tigres, eso sí, pero no saben cómo.

Si Miguel Herrera hubiera llegado en otro momento, quizás hubiera funcionado.

Pero, bajo estas circunstancias, ni Miguel ni ‘Pep’ la habrían librado.

Tu pecado fue el momento, Miguel.

No era este tu momento para llegar a Tigres.

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Texto: Jaime Garza 
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