The Wild Feathers es una de esas bandas que al momento de oírlas en realidad no estás escuchando nada nuevo, pero cuando les prestas atención, son como una mezcla de los inicios de Coldplay y lo mejor de Kings of Leon. La banda formada en Nashville, Tennessee lanzó el pasado 11 de marzo su segundo disco de estudio, Lonely Is A Lifetime, y a decir verdad, la banda sale bien librada de lo que para muchas bandas es el frustrante agujero negro del segundo disco.
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Con Lonely Is A Lifetime, The Wild Feathers entregan 11 canciones en donde la banda divaga por diversos géneros del rock, como el britpop en “Sleepers” o el rock sureño como en “Goodbye Song” una canción que se extiende hasta por 8 minutos, gracias a ese solo de guitarra que, acompañado del órgano psicodélico, nos recuerda al espíritu de bandas como Lynyrd Skynyrd, The Allman Brothers o The Black Crowes.
The Wild Feathers logran un efusivo material discográfico, uno que confirma el potencial de la banda encabezada por Joel King. Incluso la banda ha llegado a abrirles shows a figuras legendarias de la talla de Bob Dylan o Willie Nelson.
Como decíamos previamente, la banda amalgama diferentes estilos, están la despreocupada “Happy Again”, con toques de alt-country, y es que, al ser de Tennessee es innegable que las raíces del country no estuvieran presentes en la música de The Wild Feathers.
Con un sonido radio friendly, The Wild Feathers está listo para el mainstream.
Canciones clave: “Goodbye Song”, “Sleepers” y “Happy Again”
