La Otra Parte: La historia no contada del Narcotráfico
Hasta hace algunos años, en los últimos del sexenio del presidente Felipe Calderón, se le llamaba la “guerra contra el narco”. Hoy, la agenda política es otra y desde el Estado se habla de una “estrategia” en contra del crimen organizado. Pero en realidad, el nombre que se le quiera dar importa muy poco cuando los números hablan por sí solos… el clima de guerra y la expansión del crimen organizado ha generado una subcultura basada en la glorificación de la violencia y la repetición de un mensaje contundente: “el crimen paga”.
Cuando lo evidente no es el Estado de derecho, sino el delito impune, la sociedad se fractura entre aquellos que satanizan a la violencia y los que la practican y la ven como la única salida a su recluida condición social. ¿Pero en realidad es esto cierto?
José A. Uno de los hijos de los iniciadores del narcotráfico en México, mentor de dos de los capos de la droga más buscados en el mundo: Rafael Caro Quintero y Joaquín “El Chapo” Guzmán, decidió romper el silencio para contarnos su historia, la cual, rica en detalles y contrastes, desmitifica el halo de heroísmo del narco. El testimonio de José nos permite encontrar un punto de partida que nos inspira.
Ricardo Colorado (Crescend) dirige el documental La otra parte: La historia no contada del narco que muestra, en 98 minutos, la trágica historia de una realidad que lleva décadas permeando al país.
El cineasta ofrece un recorrido del problema del narcotráfico en México desde 1900, en el Triángulo Dorado, que comprende las sierras colindantes de Durango, Chihuahua y Sinaloa, hasta la fecha con especialistas como Rolando González Valdés, ex secretario de Educación del Gobierno de Sinaloa, escritor y profesor universitario; Adrián García Cortés, cronista de Culiacán, e Isaac Tomás Guevara, catedrático e investigador de la Facultad de Psicología de la Universidad Autónoma de Sinaloa, entre otros.
Además, agrega testimonios de residentes en barrios humildes de la colonia Ladrillera, Chihuahua, quienes manifiestan cómo los infantes “no van a la escuela, por vender mariguana”, por ejemplo, de Herlinda Rodríguez Almazán, de Ciudad Juárez, Chihuahua, ama de casa que perdió a dos de sus tres hijos y creó un comedor para niños “pobres y que carecen de amor”.
“El arte y el cine proponen una ventana muy fuerte para poder generar conciencia y entender una problemática que nos afecta a todos. El narcotráfico nos afecta a todos por igual” señaló Colorado en la presentación del documental.
