Girl Factory: El instinto maternal
Ayer estaba en el gimnasio haciendo mis respectivos ejercicios de pierna cuando me entró una llamada. Contesté. Era mi amiga Victoria.
– Estoy a punto de quedarme sin óvulos.- me dijo.
– ¡¿Qué?!- respondí tapándome el oído contrario a la bocina porque creí que no había escuchado bien por la música del lugar.
– ¡Qué me estoy quedando sin óvulos!- casi me gritó.
– ¿Por qué?- respondí asustada.
Luego de volver a casa nos reunimos para ir a cenar.
– Fui a una consulta con mi ginecólogo y me dijo que solo tengo 4 años para ser mamá.- me dijo con terror en los ojos.- y ¡ni siquiera tengo novio!- se lamentaba.
Victoria me contó que había ido a una revisión de rutina y había salido a la mar de estresada de con el médico, pues el doctor le dijo que para su edad -28- ya “DEBIÓ” haber tenido su primer hijo. Claro que ser mamá no está ni remotamente cercana en los planes de mi amiga, ni siquiera míos. El doctor le comentó que la edad correcta antes de que fuera riesgoso es a los 32.
Victoria estaba muy preocupada y vería el reloj en cuenta regresiva para su “deber” de traer vida a este mundo.
Ambas concordamos que no nos sentimos ni remotamente listas para ser madres e inclusive si siquiera sabemos si queremos serlo,” ¿Por qué tenemos que decidir ahora?”- nos preguntábamos preocupadas.
¿Es posible nacer sin el gen de ser madre? Con frecuencia veo en mi home de Facebook a muchos amigos que comparten fotos de bebés cute con sus gorritos y su sonrisita y lo llenan de corazones, pero ¿Qué pasa cuando estas fotos o tan solo el hecho de cargar un bebé no te provocan ganas de tener uno? ¿Es normal? ¿Es normal que casi llegues a tus 30’s, cierres tus ojos y no logres ver más allá de a ti con una pareja a futuro? ¿Qué haces cuando vas a las reuniones de tus ex compañeros de secundaria o universidad y eres la única sentada a la mesa que no habla de “pañales” y “cólicos del bebé”?
Victoria y yo nos preguntamos si todas aquellas personas que son mamás lo decidieron así tal cual, ¡Sí, sí quiero ser mamá! O ¿simplemente pasó?
¿Deberíamos congelar nuestros óvulos?- nos preguntamos mutuamente.- ¡Eh escuchado que está muy de moda eso!, así podemos posponer la alama otros 10 años, por si me arrepiento.
Creo que en la generación que vivimos aparte de estar más informados sobre métodos anticonceptivos, estamos quizá un poquito más conscientes de TODO el reto que significa ser madre, porque ya no es únicamente una cuestión fisiológica, sino que también está determinada por otros factores como la estabilidad económica, emocional, responsabilidad, etc.
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Pero tal parece que la sociedad se ha encargado de ponernos en la mira como si fuésemos una pequeña parte del mundo que no ha “alcanzado la felicidad” de estar “completa” formando una familia. No lo sé o tan solo es cuestión de que no nos ha llegado el indicado, aunque claro está que no necesitamos de una pareja para que nos nazca el gen de la maternidad, pero quizá, solo quizá si tenemos la suerte de encontrar a tu persona correcta nazca en nosotros la ilusión de querer formar una semillita que crezca en nuestro vientre la mitrad nosotros y la mitad del hombre que más amamos en el mundo.
¿Tú que crees?
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Con amor: July
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